En un artículo que está siendo ampliamente discutido en blogs , me encuentro con una discusión acerca del esfuerzo en marcha en la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT o ITU) de subirse al carro del estándar que se llamaría "IP Traceback", que permitiría hacer un rastreo inequívoco de la dirección IP desde la cual se originara cualquier tipo de tráfico en Internet. Según el artículo, la iniciativa en la UIT cuenta con un fuerte apoyo de China, es secreta, y sólo ha sido revelada en pequeños pedazos y de forma complicada por los intentos de mantenerla fuera de la vista pública.
El rastreo de direcciones IP en forma asegurada podría representar un riesgo importante para la libertad de expresión. Incluso personas que legalmente recurran a sitios de Internet anónimos para hacer denuncias de mala conducta de sus gobiernos o gobernantes podrían ser rastreadas en sus propios países y convertirse en objeto de represión. Por otra parte, el "spoofing" (impostura) de estas direcciones podría permitir a delincuentes más hábiles seguirse ocultando o incluso volver a personas inocentes sospechosas de conductas ilegales.
Éste es un tema de ésos en que se intersectan tecnología y política pública en los que en ambos campos se requiere una discusión compleja y matizada - pero ante todo, para que la discusión tenga lugar, la información que la alimenta tiene que estar disponible.
Nota adicional: un comentarista anónimo de este blog me preguntaba hace unos días sobre los proyectos de ley que se han anunciado en la prensa de Venezuela, misma que permitiría una serie de controles gubernamentales sobre la expresión en Internet. Entre otros puntos destaco que si la propuesta efectivamente conlleva el que la conexión a Internet deba ser a través de un punto único de interconexión en el propio país, sí estará preparando los medios técnicos que han sido descritos respecto a China y otros países, y que facilitan enormemente la inspección del tráfico. Para ésta no se requiere forzosamente la inspección del contenido de los mensajes; el conocer los orígenes y destinos de los mismos, como sabemos, provee por sí solo información muy valiosa tanto para perseguir a delincuentes verdaderos como para rastrear, amenazar, y en su caso silenciar a opositores políticos. Ojalá la sociedad tenga oportunidad de conocer, entender, discutir y decidir qué va a pasar con su tramo de acceso y uso de Internet.
blog by Alejandro Pisanty. If I can sustain the effort I'll touch on IT in education, Internet Governance, UNAM projects, university rankings, ICANN, and a subject or two more. Español: blog sobre tecnologías de la información en educación, gobernanza de Internet, proyectos en la UNAM, "rankings" (clasificaciones) de Universidades,ICANN y un par de temas más - si puedo sostener el esfuerzo.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Habría que ver qué tipo de provisiones toma IP Traceback (no estoy familiarizado con la propuesta) respecto a anonimizadores o redes de "ruteo en cebolla" como Tor. A través de la criptografía, a lo más a lo que podrían llegar es a determinar quién está ofreciendo a través de su computadora una puerta para que otros miembros de su red salgan de manera anónima. Claro, se puede hacer un análisis profundo de tráfico, y de ese modo encontrar los pasos previos de dicho mensaje, pero llegar al originador requeriría no sólo recursos técnicos, sino probablemente una legislación capaz de cruzar cantidad de jurisdicciones.
ResponderBorrarPero bueno, en la era del estado-policía digital... Nada es imposible.